Personajes del humor ¿lejos de la realidad?

Si algo distingue al humor dominicano desde sus primeros pasos en la radio y la televisión ha sido el ingenio de los comediantes para conquistar la risa del público con una variedad de personajes que han ido evolucionando con el tiempo.

Si algo distingue al humor dominicano desde sus primeros pasos en la radio y la televisión ha sido el ingenio de los comediantes para conquistar la risa del público con una variedad de personajes que han ido evolucionando con el tiempo.

La caracterización del campesino ha estado presente en la comedia televisiva  desde que el país estrenó su primer canal de TV (Romance Campesino), más tarde comenzaron a tomar protagonismo los personajes policiales, militar y, en los últimos años, la del homosexual.

Sin embargo, para profesionales, como el sociólogo y documentalista Omar Fortuna, los humoristas de hoy plantean una visión deformada de estos personajes, donde la ridiculización es el rasgo más frecuente, debido a que son pocos los exponentes que tienen una visión cultural general y por la carencia de buenos libretistas.

“En las décadas de los 70 y 80, el humor presentaba los valores de una sociedad campesina porque lo éramos predominantemente.

El de los últimos tiempos, desde los 90 hacia la actualidad, es una visión bastante deformada. También, el papel del homosexual lo presentan como un ´monstruo´ bastante deformado que no se corresponde con la realidad, y un componente importante para hacer esa marca indeleble de presentarlo como el desterrado de la sociedad, como una minoría, es la ridiculización.

Con respecto al guardia y los policías, tienen las mismas connotaciones del campesino porque se quedan en el imaginario con ese agente bruto y autoritario…”, afirmó Fortuna, quien por muchos años se desempeñó como libretista de Freddy Beras Goico y Richard Douglas.

Figuras como Raymond Pozo defienden su labor en esta temática, al entender que cualquier personaje que lleve a escena, sea de policía, de campesino o de clase alta, acostumbra a exagerar los rasgos sin ninguna intención de ofender. “Si lo hacemos tan real, tan exacto no va a causar ningún tipo de humor”, expresó el protagonista de Lotomán 2.0 y Al fin y al cabo. En su caso, que ha popularizado personaje como “El Cabo Azulado”, afirma que nunca ha tenido la intención de ridiculizarlo.

“Solo es un retrato exagerado. De hecho, en una época de mi vida quise ser policía, esa es mi frustración de no haber sido, ahora puedo serlo en televisión”, agregó.

Asegura que en su carrera no ha sentido rechazo por parte del público hacia ese personaje y que se considera bendecido, porque su humor ha sido aceptado en todas las clases sociales. “Es una bendición de Jesucristo. Nosotros ya podemos trabajar en un escenario como el Teatro Nacional, cuando hace cinco años era en un car wash, eso quiere decir que la gente ha ido aceptando el trabajo de uno”, agregó.

Para Aquiles Correa, la ventaja de quienes están haciendo stand up comedy es que la gente no necesariamente está esperando que el artista realice un papel de borracho, de campesino, homosexual o policía para reírse.

“Cuando te hacen una caricatura de alguien, lo que se hace es que se sobredimensionan los rasgos llamativos de esa persona”, entiende.
Sin embargo, el co-protagonista de Sanky Panky sostuvo que “nunca he estado de acuerdo con la caracterización exagerada en la pantalla de homosexuales para hacer reír”.

Otra de las figuras más populares de la televisión nacional es el actor José Manuel Rodríguez por su interpretación del exitoso personaje de “La Diva”, con el que le da vida a un homosexual que le gusta la farándula.

“Los humoristas utilizamos ese tipo de personajes, porque de una u otra forma son papeles pintorescos. En mi caso particular, que llevé a La Diva a la televisión no lo hago para ridiculizar a ninguna persona, sino que le saco provecho a su condición para hacer reír a la gente”, afirmó el actor de teatro y cine.

Aunque en una ocasión se vio en la necesidad de agredir a un hombre porque este intentó besarlo al creer que en realidad era gay, José Manuel dijo que ha enfrentado el rechazo de los heterosexuales pero no de los homosexuales.
“Muchos homosexuales visualizan el personaje de La Diva como una representación real, porque hay personas que son así, con ese deseo de hacer chisme, con esa estridencia”, dijo a través de la línea telefónica. l

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